"Todos los regalos buenos... vienen de arriba, descienden del Padre" (Santiago 1:17)

¿Valoras lo que tienes?

Cuando alguien nos da un regalo, ¿verdad que sentimos alegría por ello? Primero porque eso de que te regalen nos gusta a todos. Segundo porque esa persona se ha acordado de ti y se ha tomado la molestia de ir a comprarte un regalo.

Pero cuando más alegría sentimos es cuando es una sorpresa, que no nos lo esperábamos. Sentimos agradecimiento hacia esa persona por ese detalle. Y si el regalo es bonito y nos gusta, nos emocionamos y nos sentimos felices.

¿Pero sabes quién se emociona, siente alegría y satisfacción? La persona que nos ha hecho el regalo. Ha logrado su objetivo, a saber, hacerte feliz aunque haya sido por unos momentos. ¿Por qué? “Hay más felicidad en dar que en recibir” (Hechos 20:35)

Dios, es un Dios feliz, y cuando nos ‘regala’ cosas, se siente feliz. Y nosotros que hemos sido creados a “su imagen y semejanza” (Génesis 1:26), nos ocurre lo mismo, nos hace felices dar a otros y ver en ellos la alegría.

Cuando Dios creo al hombre “soplo el aliento de vida en sus narices y el hombre llego a ser un alma viviente” (Génesis 2:7), se sintió feliz de ver al hombre vivo. Sí, le regalo lo más bonito que nos pueden regalar, a saber, la vida. ¡Qué regalo más bonito!

Qué tristeza y dolor siente alguien cuando la persona regalada no aprecia el regalo que le has hecho. Te sientes decepcionado, triste y dolido. Por desgracia, muchas personas no aprecian el ‘regalo’ de la vida que Dios le ha dado. Eso mismo sintió Jehová Dios, dolor y tristeza (Génesis 6:6).

La gente pone su vida en peligro ‘tontamente’. Desafían las leyes, bien puesta por las autoridades, como las puestas por el mismo Dios. Piensan que no les va a pasar nada. No aprecian ese magnífico regalo que Dios les ha dado, la vida.

¿Y usted? ¿Aprecia ese regalo que ha recibido de parte de Dios? ¿Cuida de su vida y no la pone en peligro? Saludos.

Contador - aguilar-lozano numero de visita: 69